El economista de FIEL Daniel Artana aseguró hoy que “la herencia K” dejó un “legado cultural” que valoriza “el consumo y no la inversión”, y que por eso se están sosteniendo los niveles de los momentos en que la soja cotizaba en torno de los u$s 600 dólares la tonelada y Brasil no había caído en la peor recesión de su historia.
“La herencia k fue muy pesada en lo económico y en lo cultural, porque todos dicen que hay que motorizar el consumo y no las inversiones”, dijo el economista, y apuntó: “Nos estamos endeudando para sostener niveles de consumo que eran posibles cuando teníamos otros precios de nuestros productos y Brasil en otras condiciones”.
Artana participó junto a Orlando Ferreres, Daniel Heymann y Roberto Frenkel en un panel del Congreso Económico Argentino, en el marco de la Expo EFI, en el que los cuatro destacados economistas expusieron su visión sobre la coyuntura económica y en el que coincidieron en el que el gasto público es uno de los desafíos principales del Gobierno.
En su exposición, el analista de FIEL advirtió: “La pregunta es si esto transitorio. Si el shock es permanente, la cuenta de la tarjeta de crédito hay que pagarla. Es difícil que vuelva la soja a 600 dólares la tonelada y tampoco Brasil con el tamaño en dólares que tuvo. Así que tenemos que ir corrigiendo”.
“Tenemos una recuperación que nos vuelve a poner en un nivel de 2011, porque este año la economía va a crecer en torno del 3%. La clave es cómo hacemos para salir de esta trampa de estancamiento con inflación alta”, indicó.
Sin embargo, señaló que hay “cierta fragilidad en los flujos (…) porque hay déficit fiscal y déficit externo” y “ambos están interrelacionados”.
“El déficit fiscal fue de 15.000 millones de dólares y tampoco hubo inversión extranjera directa. Como no había muchas reservas, se empezaron a endeudar. El 40% de déficit se explica por gastos en turismo por veraneo en el exterior”, detalló.
Al finalizar, Artana indicó que el “gobierno no puede darse el lujo de anunciar un programa fiscal y no cumplirlo”.
Fuente: El Cronista